CONSTRUYE UNA RELACIÓN DURADERA CON TU JARDÍN ENTERRADO, BRINDÁNDOLES CARIÑO Y AMOR A LAS PLANTAS CON REGULARIDAD.
Has plantado tu primer jardín enterrado y ya está en marcha y creciendo.
¡Felicidades! Ahora que el trabajo pesado está hecho, todo es cuestión de mantenimiento de rutina. Cuidar tu jardín con regularidad, mantendrá tus plantas y tu suelo en su mejor momento.
No te preocupes, cuidar una cama enterrada puede ser fácil. Simplemente, reserva unos minutos cada día para abordar estos pasos esenciales.
Camina por tu jardín. Family es importante dedicarle tiempo a admirar tu jardín. ¡Te lo has ganado! Revisa los tallos y las hojas para ver si tienen un crecimiento constante y una coloración uniforme. Presiona tus dedos en la tierra para ver si está seca.
Mira debajo de las hojas en busca de plagas que podrían estar tratando de esconderse. Haz una lista de cualquier cosa a la que quieras dedicar más tiempo más adelante.
Riega el suelo seco. Al igual que nosotros, las plantas no durarán mucho sin agua. Un enfoque lento y bajo que sature completamente la base de tus plantas también es una forma segura de llegar a las raíces.
Además, en un día caluroso, el agua que se rocía desde arriba puede evaporarse antes de llegar a nuestros amigos sedientos de abajo. Riega por la mañana, si puedes, para ayudar a que la humedad se asiente profundamente en el suelo antes de que el sol brille más.
Mantén tus plantas bien alimentadas. Las plantas en crecimiento absorben nutrientes del suelo, por lo que es necesario devolverles lo que extraen. Cada 3 meses puedes usar abono casero, pero asegúrate de que esté completamente descompuesto para obtener mejores resultados. Los nutrientes esenciales del suelo promueven un fuerte crecimiento de las raíces, lo que significa plantas hermosas, follaje más completo y una cosecha mayor.
Limpia el desorden. Retira las plantas muertas, las hojas marrones, las malas hierbas y otros restos como palos y pasto que puedan acumularse con el tiempo. Mantenga la tierra distribuida uniformemente y alejada de los tallos de las plantas y asegúrese de que sus plantas tengan suficiente espacio para respirar y crecer. Y bueno, a todos nos gusta nuestro espacio, incluso las plantas.
Ahora que ya sabes cómo cuidar tu jardín, podrás darles a tus plantas todo el cariño y atención que merecen. Antes de que te des cuenta, te darán una cosecha abundante de verduras y hierbas para cosechar, flores para detenerse y oler, ¡o tal vez un poco de ambas!